Lo suficientemente cerca del mar para oler la brisa y sentir la Costa Brava, pero lejos del ruido, el tráfico y las multitudes.
Este chalet independiente en Calonge, con 210 m² distribuidos en dos plantas, está diseñado para vivir despacio, rodeado de luz y naturaleza, con unas vistas panorámicas al mar lejano, las montañas y el paisaje verde que te recuerdan cada día por qué elegiste este lugar.
En la planta principal encontrarás un salón a dos niveles con salida a la terraza, un comedor mirador perfecto para disfrutar de las vistas, sala de estar, y una cocina abierta con barra americana y salida directa al exterior. En la misma planta hay tres dormitorios (uno de ellos en la planta principal) y un baño completo con doble lavabo.
La planta inferior alberga una suite con baño privado y acceso a una terraza con vistas espectaculares.
El exterior ofrece una piscina privada, jardín cuidado y una zona de barbacoa para largas comidas al sol.
Una casa luminosa, amplia y tranquila, ideal para quienes buscan espacio, paisaje y calma, sin renunciar a tener el mar cerca.